EE.UU.: Atasco en el puerto de Oakland supera al del puerto de Los Ángeles
Por MundoMarítimo
El puerto de Los Ángeles ve progresos en la reducción del atasco de buques mercantes. Sin embargo, si se navega hacia el norte, hacia el puerto Oakland, la cola es aún más larga y se habla de que la congestión durará todo el verano septentrional. El viernes 16 de abril, 25 portacontenedores esperaban para entrar en el puerto de Oakland anclados en la bahía de San Francisco y en una zona de espera en alta mar, frente a los 21 de principios de semana y con pocos cambios respecto al mes anterior, según una fuente. Fuera de los puertos adyacentes de Los Ángeles y Long Beach, la cola era de 21 naves, también la misma que a mediados de marzo, reporta Bloomberg.
Cuando la cola de Los Ángeles-Long Beach alcanzó un máximo de unos 40 buques a principios de febrero, algunos de ellos buscaron opciones más rápidas en la Costa Oeste. CMA CGM SA, hizo su primera recalada en Oakland de un servicio desde China. Los puertos de Seattle y Tacoma también invitaron a los buques a visitar sus atracaderos disponibles.
Dos meses después, docenas de ellos siguen llegando cada semana desde Asia, y los puertos estadounidenses tienen pocos medios para aliviar la presión. «Se parece mucho a un globo: si se aprieta un extremo, el otro se expande, pero el globo no se hace más pequeño», dijo Andy Lane, vicepresidente de servicios de asesoramiento de Sea-Intelligence.
En el epicentro de la fuerte recuperación del comercio mundial en el último año, los puertos californianos no son los únicos que se enfrentan a un volumen sin precedentes al entrar en el segundo año de la pandemia de Covid-19. En el puerto de Singapur, el mes pasado se estimó que el rendimiento alcanzó el nivel más alto registrado. En la USEC, el puerto de Savannah, en Georgia, declaró que está en vías de superar la cifra récord de 5 millones de TEUs en su ejercicio fiscal que finaliza en junio.
¿Quiénes pierden?
Hay tres grupos principales que salen perdiendo: las empresas que están pagando tarifas de flete récord y no saben cuándo podrán llegar sus productos a los consumidores que esperan que el comercio electrónico acelere sus entregas sin que les cueste más; y las líneas navieras que pese a estar registrando beneficios récord, podrían ganar aún más si pudieran entregar los contenedores a tiempo.
Muchos de los casi 400 buques atrapados durante el bloqueo del Canal de Suez a fines de marzo llegaron la semana pasada a sus destinos en Europa, Asia y la USEC. Los cronogramas se han visto alterados, dejando a los puertos sin saber cómo gestionar el imprevisible flujo de buques.
Aunque el puerto de Nueva Orleans no ha sufrido ninguna repercusión directa por el bloqueo del canal, «este acontecimiento ha perturbado aún más las cadenas de suministro mundiales y habrá repercusiones indirectas de los retrasos en los mercados extranjeros que provocarán una reducción de la capacidad de los buques para los expedidores», señaló la portavoz del puerto Jessica Ragusa.
En Oakland, que manejó un número récord de contenedores entrantes durante el normalmente tranquilo mes de marzo, están viendo una demanda sostenida de bienes de consumo importados. Eso significa que hay poco respiro en los retrasos de los buques entre las dos temporadas altas para el transporte marítimo: justo antes del Año Nuevo Lunar, y la reposición de inventarios a finales del verano antes de la temporada de compras navideñas.
«No creemos que haya una tregua», dijo el vocero del puerto de Oakland, Robert Bernardo. Lane, de Sea-Intelligence, dijo que es difícil predecir cuándo volverá la normalidad. «Incluso siendo optimistas, eso no ocurrirá hasta dentro de varios meses», dijo. «Una vez que los puertos se ven envueltos en este tipo de situaciones, y a menos que la demanda se debilite drásticamente, tradicionalmente se necesita mucho tiempo para salir del caos».